IMAGINATE.

Imagínate, mis besos rozando tus labios tibios en esta noche. Imagínate el roce de nuestros cuerpos, enredados cuales hiedras, envueltos en suaves caricias. Imagínate como la luz de la luna se posa en nuestra desnudez, que sin premuras se dejan envolver en besos lentos eclosión de la pasión. Imagínate navegando juntos en nuestro mar, sin más herramientas que este sentimiento; el cual trasciende y nos torna uno, en un vaivén de gozo. Imagínate pleno y gozoso en mis pechos tu lecho, así te imagino en mí siendo mi corsario, asaltando mis fortalezas, que sin perezas para ti desploman bajo el equinoccio brujo. Imagínate despertando en las orillas de mis playas haciéndolas marejadas, al sentir tus besos embelesos de mis sentidos. Imagínate cual volcán, inundando con tu lava mis entrañas, mientras mis manos te arañan. Imagínate sintiéndonos como danza de nuestros sentidos, fundiéndonos con el alma y el cuerpo.